Cómo se forma un líder de manera natural

El liderazgo es uno de los conceptos más utilizados en los últimos tiempos en el mundo de la empresa. Ser líder implica distinguirse del resto, ser capaz de tomar las decisiones adecuadas para una organización y tomar la iniciativa para lograr la eficacia de cualquier equipo. Pero ¿qué hace un buen líder? Javier Torregrosa, director del Máster en Comunicación no Verbal Científica y Comunicación Integral de Florida Universitària Business School desgrana las claves para lograr un liderazgo exitoso.

“Todo lo que conlleve interactuar con las personas que nos rodean de forma que nos respeten y confíen en nosotros no es tarea fácil, aunque creamos que sí. No se trata de imponer nuestro criterio o ser personas autoritarias. Debemos conocer cuáles son los comportamientos necesarios para conseguir ser líderes. Mucha gente nace con madera de líder, pero también podemos crear líderes”, ha relatado. 

El experto en comunicación no verbal ha enumerado cuatro puntos clave para desarrollar todo el potencial como líder en una organización.

La primera clave, a su juicio, es la autoconciencia. “Hay que comenzar analizándonos a nosotros mismos. Un buen director o directora de orquesta debe conocer sus fortalezas y sus debilidades y, por supuesto, trabajar duro para mejorar cada día. De esta forma conseguirá la seguridad que necesita para hacer frente a cualquier contratiempo, ya sea tuyo o de las personas que tienes a tu cargo”. 

Javier Torregrosa ha subrayado que la observación es otra de las líneas a seguir. “El frenético ritmo de vida que llevamos, nos obliga a ignorar lo que sea prescindible para nuestros intereses. Sin embargo, todo en esta vida influye. En una casa son tan importantes los cimientos como el tejado, aunque nos fijemos en su decoración”.

El experto ha añadido que observando la comunicación no verbal de las personas que nos rodean podemos aprender mucho de ellas. “Desde cómo es su psique, pasando por su estado anímico hasta las emociones que pasan por su cabeza cuando mantenemos una conversación. Estas señales nos indican incluso si una persona se deja llevar más por los sentimientos, el raciocinio o lo terrenal. Algo muy importante a la hora de conectar, por ejemplo, con los compañeros de equipo, tener éxito en un negocio o, incluso en nuestra vida personal, a la hora de elegir pareja”. 

Otro de los ejes del liderazgo es, según Torregrosa, la empatía. “La empatía es algo fundamental en nuestras vidas para relacionarnos con el entorno, ya sea laboral, familiar o social. Nuestro ritmo de vida nos lleva al egoísmo. No podemos pedir que los demás nos respeten, nos apoyen o confíen si no hacemos lo mismo por ellos”. 

“Conocer un poco de la vida de las personas que nos rodean, esa cercanía ayuda al líder a empatizar con ellos cuando surja un contratiempo, puesto que conocerás su situación. Y, por supuesto, seguro que estarán agradecidos de que te intereses por sus vidas y mejorarán su concepto sobre nosotros”. 

La palabra “constancia” no puede faltar para desarrollar un buen liderazgo. “Un director o directora siempre está al pie del cañón. Ser perseverante, intensificar el esfuerzo día a día es, al fin y al cabo, es una de las grandes características de un líder. Pero nunca hay que olvidar que el liderazgo se fomenta con apoyo de la gente que rodea al líder”, ha agregado.